viernes, 11 de enero de 2013

Sobre el trabajo en la era de Internet y la marca personal.

(Dejo una actualización a fecha 9 de mayo de 2017. Es una infografía sobre marca personal)

El filósofo  Marshall Mcluhan (que citaré a menudo en próximas entradas), en su libro “Comprender los medios de comunicación” estableció que en  “la Edad Eléctrica, como en la tribu, la labor del trabajo consiste en la dedicación y el compromiso”  y también dice, lo que desde mi punto de vista  me parece crucial para entender mucho de lo que está pasando en la actualidad en relación al trabajo y la sociedad de la información, que “ en el sector de la información, el trabajo que hacer, consiste precisamente en mover información. (…) En la edad electrónica de información instantánea desaparecen tanto el tiempo (medido de forma visual y segmentaria) como el espacio (uniforme, pictórico y cerrado). En la edad de la información instantánea, el individuo deja su trabajo especializado y fragmentado para asumir la función de recolector de información. Así como el primitivo cazador-recolector obraba en completo equilibrio con todo su entorno, el recolector de información del presente está volviendo al concepto inclusivo de cultura. En este nuevo mundo nómada y sin trabajo, nuestra cantera es el saber y la comprensión de los procesos creativos de la vida y la sociedad”.  
Así leído, vemos cómo Mcluhan era un auténtico visionario, pero considero que este concepto del manejo de la información es todavía un tema tabú en muchos profesionales. Frecuentemente hay miedo  a compartir información, innovar sobre ella, progresar y evolucionar en nuestros respectivos trabajos.
Internet como canal nos permite, a la vez que consumimos datos descomunales sobre cualquier materia, convertirnos en emisores de información. En este mundo de cambios constantes, una cosa está clara: tu profesión dependerá, en gran parte, de la información que trasmitas y el uso que hagas de la que recibas.
Si atendemos a estos criterios, que evidentemente están sujetos a debate, la búsqueda de empleo o, mejor dicho, la búsqueda de ingresos también estará supeditada a lo que  “ofrezco” en este mundo de información. Para saber lo que ofrezco, es evidente que es necesario conocerse a sí mismo, un elemento que repito constantemente so pena de parecer pesado, pero si no sabes quién eres profesionalmente, es difícil trazar un camino en el que puedas llegar a algún sitio. Por lo tanto, debemos tener en cuenta dos aspectos:

·         El trabajo que hacer en un mundo regido por  la información  es mover la información.

·         Si mi trabajo consiste en trabajar con la información, he de saber qué ofrezco, qué me interesa y qué se me da bien.

Como hemos dicho anteriormente, Mcluhan nos dice que en la era “eléctrica” la labor del trabajo consiste en la dedicación y el compromiso. Para ello es mejor que elijas un sector que te interese y te guste. Pero has de tener en cuenta -a mí me pasa con frecuencia y no deja de sorprenderme- que quizás dentro de poco esa profesión puede seguir igual, cambiar o desaparecer. No me refiero al “puesto de trabajo” sino a la profesión en sí. En este sentido, actualizarse debe ser prioritario. No digo modernizarse,  sino que -al igual que un programa de software- debemos, manteniendo nuestras propias funciones y cualidades, utilizar los nuevos medios para innovar y aprender de las nuevas tendencias con la intención de mejorar y progresar. Dicho en pocas palabras, es hora de incorporar de una vez el concepto de formación permanente en nuestras vidas.

Entonces, siguiendo este hilo argumental,  nos encontraríamos con  el concepto de “marca personal” no sólo como lo que proyectas, sino como ese cúmulo de trabajo en el que te tienes que apoyar. Si te interesa la comunicación, los idiomas o lo que sea, y decides dedicarte profesionalmente a ello, primero tienes que trabajar duro y luego ver cómo proyectas ese trabajo al exterior ganando la visibilidad que necesitarás para encontrar empleo o clientes, en caso de que seas una empresa, o, simplemente, desarrollar tu carrera dentro de la empresa para la que trabajes.  Y os preguntaréis: ¿cómo puedo ganar visibilidad? Pues muy sencillo, utilizando Internet.

Un blog es la mejor forma de difundir tu trabajo en el mundo de la información. Es crear tu propio sistema. En él, demuestras lo que sabes, lo que conoces, y eso es fundamental. No nos olvidemos de que en la sociedad del conocimiento te contratarán por lo que “sabes hacer” y por lo que conoces, no sólo por lo que dices que has hecho en una o dos páginas de papel. Los profesionales estamos para resolver problemas, por lo que para hacer “networking” hay que demostrar lo que vales. Olvidémonos de conocer gente por conocer y supeditar a la suerte el que encontremos un trabajo o clientes haciendo el mismo currículum que miles de personas y buscando en los mismos portales que millones de usuarios.  Demuestra tus conocimientos y habilidades, difúndelos, muévete, hazte con un espacio propio y entonces, poco a poco, se irá reconociendo tu trabajo. Recapitulemos:

·         Tienes que trabajar duro para configurar un  perfil profesional propio.

·         Tienes que proyectar al exterior lo que sabes hacer y, para ello, una gran herramienta es el blog.

Cuando charlo con muchos amigos y familiares sobre el mundo laboral, siempre les comento lo mismo: si eres invisible, nadie se acordará de ti. Ganar visibilidad es fundamental, pero no como vendedor de humo, sino como un profesional de valía. Veo a gente hipercualificada y preparada que no utiliza los medios que nos ofrece Internet, cuando su profesión puede apoyarse perfectamente a todo lo que puede ofrecer la red, para desarrollar su  “marca personal”. En mi opinión, seguir con  el único criterio de estar llamando a puertas para que nos contraten  y no crear nuestro propio sistema es una mesa que se queda muy coja.

En mi caso personal, este blog es mi espacio profesional más preciado. Todas las horas que le dedico son importantes porque:

·         Para escribir las entradas, necesito estar constantemente informado y formado, lo que me permite estar al día. Independientemente de que esté contratado, desempleado o sea “freelance”, actualizar de forma continua mi blog es una excusa para dominar la información más importante relacionada con mi sector profesional.

·         Al ser un espacio donde intento demostrar mis conocimientos sobre mis especialidades, se ha convertido en mi currículum.

·         Me permite debatir con gente y aprender de otros profesionales. Es muy importante: si compartes, recibes.

Dedicación y compromiso con tu desarrollo profesional es la clave. Internet una herramienta  fantástica.

Si queréis saber más sobre la marca personal, os dejo una breve bibliografía.


Página web sobre marca personal.
Vídeo de  Enrique Dans sobre marca personal

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