Buena videocharla la que tuvimos ayer sobre orientación laboral

Ayer tuve la ocasión de compartir hangout -organizado por la plataforma eProform, de la que soy miembro- con tres grandes personas que se dedican  al mundo del empleo. Es lo que tiene el socialmedia: te permite conectar con gente que tiene tus mismas inquietudes y que se mueve por los ámbitos que a ti también te interesan. Hablo de XoseAlberte Cea, Silvia Palomino y Juan Manuel López. De los tres, al único que conozco en persona es a Juan Manuel, ya que ambos vivimos en Almería y coincidí con él en el lugar donde trabaja. Pero antes ya nos conocíamos por las redes y su actividad difundiendo los contenidos relacionados con el Servicio Universitario de Empleo de la Universidad de Almería es de tener en cuenta. A Silvia la sigo desde hace mucho tiempo. Su actividad es muy intensa, convirtiéndose en una gran dinamizadora del mundo de las comunidades virtuales dedicadas al empleo. Xose Alberte para mí es un referente desde hace años; la suya fue una de las primeras cuentas que empecé a seguir en Twitter y, desde luego, no paro de aprender de él todos los días.

Durante poco más de 50 minutos abarcamos distintos temas, como la diferencia entre la orientación y la intermediación, la formación que tiene que tener un orientador o la controversia entre los servicios públicos de empleo versus servicios privados. Abordamos, cómo no, la diferencia entre el número de desempleados en España por orientador -unos 400, según estadísticas- y el ratio con el que trabajan muchos países europeos como Alemania - unos 100-.

El principal problema con el que tiene que lidiar la orientación laboral en España lo tiene que afrontar la economía en general: la falta de creación de empleo. En eso, quizás la modernización de los servicios públicos sea una obligación, pero sin perder la necesidad de que sigan siendo públicos, con un carácter de servicio. Luego, los agentes privados de intermediación colaborarán dentro de un ámbito muy determinado. 

La reflexión final giraba en torno a la irrupción del 2.0  y el reto que tienen los orientadores de cara a moverse dentro de un mundo digital tan dinámico.

Bueno, ya no me enrollo más. Os dejo el videodebate.